Ciclismo y disfunción eréctil ¿Verdad o mito?
Existe mucha controversia sobre si la bicicleta puede influenciar negativamente en la función sexual, particularmente en la disfunción eréctil. Los ciclistas profesionales tienen un 4,2% de prevalencia de disfunción eréctil, mientras que los corredores un 1,1%.
El ejercicio aeróbico es fundamental para una buena salud física y sexual. Permite una mayor salud del endotelio vascular permitiendo así una mejor perfusión y oxigenación de todos los tejidos y órganos del cuerpo. Aquellos pacientes que realizan ejercicio frecuentemente, tienen un mejor estado de salud sexual y menor tasa de disfunción eréctil.
Estudios
Existen diversos estudios que sugieren que los microtraumatismos en el periné pueden influenciar negativamente en la función sexual, tanto del hombre como de la mujer.
Estos estudios son tan antiguos como de la era de Hipócrates, quien observó que los grupos nómadas a caballo tenían mayor prevalencia de disfunción eréctil comparado con los nómadas a pie.
Actualmente estudios realizados por grupos de urólogos en Boston, Noruega y Hamburgo han demostrado que el uso de bicicleta por 30 minutos al día aumenta el riesgo de desarrollar disfunción eréctil o problemas perineales.
La hipótesis se basa en que los microtraumatismos constantes generan un daño microvascular en el endotelio del periné y genitales, alterando así la perfusión de los cuerpos cavernosos del pene y clítoris en la mujer.
Tipos de asientos efecto
El tipo de ciclismo y sillín utilizado tienen un efecto directo en el desarrollo de la disfunción sexual. Un sillín estrecho y largo hace que la presión del cuerpo recaiga en la zona del periné, facilitando asó los microtraumatismos perineales y daño microvascular. Por otra parte, el sillín ancho y de nariz corta permite que el peso corporal recaiga sobre las tuberosidades isquiáticas que son los huesos situados en los glúteos, de tal forma se evitan los microtraumatismos mencionados. El ciclismo de montaña conlleva mayores traumatismos que el ciclismo urbano, por lo que está más asociado a disfunción sexual.
Otros estudios han demostrado que el cambio de sillín deportivo por uno ancho y de nariz corta puede ayudar a mejorar los problemas sexuales en ambos géneros.
Tenemos que continuar haciendo ejercicio, pues mejora nuestra salud mental y corporal además de la calidad de nuestra vida sexual. Desde el punto de vista urológico sugerimos que los pacientes que realicen ciclismo utilicen sillines anchos y de nariz corta, mantener el manubrio a una mayor altura, evitar que la nariz del sillín apunte hacia arriba, si las distancias son prolongadas realizar descansos intermitentes y tratar de no apoyar demasiado la zona perineal sobre el sillín puede ser beneficioso.
En caso de síntomas como adormecimiento del escroto y/o glande, dolor perineal, empeoramiento de la calidad de las erecciones o molestias al orinar, sugerimos acudir a una valoración urológica para descartar complicaciones mayores.