Especialidades

Prótesis de pene

La prótesis de pene es una solución permanente para la disfunción eréctil que permite tener una erección en el momento deseado y por el tiempo deseado.

¿Qué es una prótesis de pene y cómo funciona?

La prótesis o implante de pene es un dispositivo que se implanta en el interior del pene con el objetivo de otorgarle a éste capacidad para tener rigidez y mantener relaciones sexuales con penetración.

Consta de dos cilindros que se insertan en el interior de los cuerpos cavernosos y hacen las veces de éstos para conseguir el estado de erección.

Dr Romero especialista en prótesis de pene

Operación prótesis de pene

El implante de prótesis de pene se realiza mediante una intervención quirúrgica bajo anestesia y, debido a que una vez implantada no es posible retomar otros tratamientos, se constituye como el último de los escalones entre las opciones terapéuticas para la disfunción eréctil.

Existen varias vías para la colocación de la prótesis y la elección de la misma depende del cirujano y del tipo de prótesis. La incisión se puede realizar:

  • Vía subpubiana: por detrás del pubis.
  • Vía subcoronal: bajo el glande.
  • Vía penoescrotal: entre la base del pene y el escroto.

Tras la operación se le coloca al paciente un vendaje compresivo que se cambia a las 24h. El paciente pasa un tiempo en la unidad de recuperación postanestésica antes de pasar a su habitación, donde ingresará un periodo muy corto o, en muchos casos, inexistente.

Los días posteriores a la intervención debe haber bloqueo de pene y aliviar el dolor con los analgésicos pautados por el médico.

Entre las complicaciones que pueden darse tras la intervención se encuentran la retención urinaria, la aparición de hematomas o edemas o, en casos de complicación grave, la infección protésica, que afecta a del 1-8% de los casos y que puede conllevar su retirada. Una vez superado el primer mes, la posibilidad de infección disminuye drásticamente y puede retomarse la actividad sexual.

Su implantación por centros y cirujanos expertos reduce las complicaciones asociadas a la intervención. El grupo de urología de ROC Clinic está reconocido por el Ministerio de Sanidad como uno de los dos grupos acreditados en España para la realización de estas intervenciones.

Tipos de prótesis de pene

Prótesis de pene maleables

Se componen de dos cilindros de silicona con un esqueleto rígido pero maleable (habitualmente, de plata) en su interior. Cada cilindro se introduce en los cuerpos cavernosos tras realizar una incisión en los mismos. De este modo, el pene queda con la consistencia necesaria para llevar a cabo una penetración. El inconveniente de estas prótesis es que el pene se mantiene constantemente en estado de rigidez, pudiendo únicamente modificar su posición. Sin embargo, presenta dos grandes ventajas: son más económicas y más sencillas de utilizar, dado que no es necesario activarlas y desactivarlas. El postoperatorio y la recuperación suelen ser también más rápidas.

Prótesis de pene hidráulicas

Se caracterizan porque los cilindros son huecos y, mediante un mecanismo hidráulico, éstos se rellenan de suero para conseguir la erección. Dependiendo de la complejidad del mecanismo, se dividen en:

  • a) Prótesis de dos componentes: Los cilindros se unen con una bomba que quedará alojada en el escroto. De este modo, cuando el paciente presione la bomba, el suero pasará a los cilindros inflables consiguiendo así la rigidez. Para desinflar la prótesis, basta con presionar sobre los cuerpos cavernosos hasta su vaciado completo.
  • b) Prótesis de tres componentes: son las de mayor funcionalidad. Se asemejan a la erección natural y consiguen un estado de flacidez casi fisiológico. Además de los cilindros, se componen de una bomba (que se coloca en escroto) y un reservorio (detrás del pubis) conectados entre sí. Esta bomba presenta dos botones para el vaciado y llenado de los cilindros. En la fase de vaciado, el suero queda alojado en el reservorio. Son, por el contrario, las de mayor coste económico.

Resultados de la prótesis de pene

La satisfacción tras colocación de una prótesis de pene es de las más elevadas entre todas las terapias descritas para la disfunción eréctil. La prótesis no interfiere con deseo sexual, la sensación de orgasmo, ni la eyaculación. Sin embargo, el paciente debe saber ser consciente de que no se incrementa la longitud del pene, observándose, en algunos casos, un acortamiento de 1-2 cm.

Los pacientes con prótesis hidráulicas de tres componentes son los que mayor grado de satisfacción alcanzan. Algunos estudios señalan que el 92,5% de los casos mantenían mínimo 1,7 relaciones semanales a los 5 años tras la cirugía.

La tasa de fallo mecánico a los 5 años es de aproximadamente del 10%.

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