Hablamos sobre patología prostática, robot hugo y biopsia prostática por fusión de imágenes en el programa «¿Qué Me Pasa, Doctor?«, de La Sexta.
La glándula prostática causa dos de las enfermedades más frecuentes en el varón: el cáncer de próstata y la hiperplasia benigna de próstata. Este tipo de tumor no presenta síntomas en sus estadios iniciales, por lo que es fundamental acudir a revisiones anuales con el urólogo a partir de los 50 años o de los 45 años si hay antecedentes familiares de cáncer de próstata. Ante la sospecha de un tumor prostático clínicamente significativo, por un PSA elevado o un tacto rectal anómalo, se indica la realización de una resonancia nuclear magnética multiparamétrica de próstata. Con ella, y gracias al ecógrafo de fusión (Koelis), podemos realizar biopsias dirigidas. Esto es lo que se llama biopsia prostática por fusión de imágenes, que coge la imagen de la resonancia nuclear magnética, que por primera vez ofrece imágenes de tumores prostáticos sólidos, y la fusiona con las imágenes del ecógrafo tomadas en tiempo real.
Esta herramienta de diagnóstico, tan precisa y segura, nos permite, en caso de detección de tumor, planificar un tratamiento personalizado para cada paciente. Si la mejor opción terapéutica para el paciente fuera la extirpación de la glándula (prostatectomía radical), proponemos llevarlo a cabo a través de un abordaje robótico. Para ello, contamos en la actualidad con dos robots quirúrgicos: Hugo, de Medtronic, y DaVinci, de Intuitive. Sin duda, excelentes herramientas para el tratamiento de patologías uro-oncológicas, con numerosas ventajas para el paciente: menos agresión quirúrgica, menos dolor, un postoperatorio más corto, menos sangrado y menos necesidad de transfusión.